Un germinado es un alimento vivo, una pequeña planta en su máximo potencial y vitalidad. Al germinar, se hace digerible una semilla que antes no lo era. El almidón se convierte en azúcares más simples, las proteínas en aminoácidos esenciales de fácil digestión y los minerales y vitaminas están en formas más asimilables.
¿Por qué hacer germinados en casa?
Esta gran cantidad de vitaminas, enzimas, proteínas hace que sean alimentos muy nutritivos y saludables. Además, ayudan en los procesos de desintoxicación, depuración y eliminación de residuos almacenados en el organismo, fortalecen el sistema inmune, facilitan la digestión, mejoran el funcionamiento y la flora intestinal entre otros beneficios.
¿Qué es la germinación de una semilla?
La germinación es el proceso por el que una semilla despierta. Pasa del estado de latencia a desarrollar la nueva planta. Para esto es necesaria unas condiciones ambientales adecuadas, sobre todo temperatura y humedad. La luz en esta fase no es necesaria.
¿Qué se puede germinar?
Para hacer germinados se pueden usar la mayoría de las semillas, excepto de solanáceas (tomate, pimiento, berenjena, patata…) que son tóxicas. Lo más fácil y habitual son las legumbres (soja, lenteja, garbanzo, guisantes, alfalfa…), cereal (trigo, cebada…), oleaginosas (pipas de girasol…), hortalizas y verduras (rábanos, coles, mostaza, rúcula…) y algunas aromáticas (cilantro, hinojo…)
Frescor, color, sabor y salud en tus platos
Cada semilla nos proporciona diferente calidad nutricional:
- Alfalfa: una buena fuente de vitaminas A, B, C, D, E, FY K
- Trigo: es rico en vitaminas B, C, E y muchos minerales
- Soja verde: buena fuente de proteína, fibra y vitaminas Cy A
- Lentejas: muy rica en proteínas (un 26%) Coles: son fuente de vitaminas: K1, Cy B, además de fibra, manganeso, y potasio, entre otros.
Os animamos a incluir los germinados en vuestra alimentación. ¡Los germinados son alimentos frescos que nos aportan VIDA!
Escrito por Amarjit K.
Imagen de cabecera: Alexander Sergienko en Pexels